Como persona me defino como...
Un hombre de Mendoza que intenta todos los días de su vida
ser buena persona y producir placer en la mayor cantidad de gente con el
trabajo que me toca hacer.
Ser creador de vinos es ser...
Es intentar reflejar una cultura que lleva ciento de años de
historia poniendo el amor y la dedicación que se merece la transcripción de
estas huellas encriptadas en la uva y en cada zona
Mis valores y principios al hacer un vino son...
Amor, pasión y trabajo. Además, respetar y tener la humildad
de entender que uno es un pequeño eslabón de millones de pasos que tienen como
consecuencia que un vino llegue a una góndola y sea bebido por alguien. Es
básicamente entender el mundo del vino como un suceso de innumerables milagros
que, en definitiva, deberían producir placer.
Antes de elaborar un vino me inspiro en...
Es difícil pensar en una sola cosa que me inspire pero creo
que al final tiene que ver más con lo intuitivo. Pero si tuviera que ponerle un
nombre a la musa, sin duda es la literatura, especialmente latinoamericana.
También la música y la vida en sí.
La literatura en mi vida es...
Es una fuente de conocimiento que me permitió entender la
importancia de la diversidad y comprender que existe una enorme cantidad de
caminos para lograr el amor a la vida. En mi caso en particular, la vida pasa
por la cultura del vino y lo que me hace levantarme todas las mañanas
intentando hacer un mundo mejor.
El secreto de todo gran vino es...
La historia que tiene detrás de cada trazo en la boca, cada
sensación en la nariz... Tiene que estar creado en base a la diversidad de cada
terruño, de cada uva y dejar la marca del hombre que le imprime un carácter
como parte de un proceso de creatividad y amor. Obviamente todo basado en
argumentos científicos y tangibles.
Mi objetivo en este camino como enólogo es...
Intentar terminar produciendo vino con los mismos
sentimientos de mi infancia, libre de todo prejuicio y paradigma impuesto como
base de sustento de una imagen. Creo que la infancia tiene el don de la
inocencia, el respeto y la comprensión de cosas que con la edad vamos
perdiendo... Espero poder volver a ese disfrute permanente de trabajo y juego.
El mayor desafío que enfrento día a día...
Es sin lugar a duda entender que nosotros (los enólogos)
somos parte de una actividad que cambia después de una enorme cantidad de
tiempo y que sólo estamos de paso. Somos un grano de arena que involucra miles
de voluntades en torno al aprendizaje de la humanidad a través del vino.
Nuestro trabajo perdurará en el anonimato como las miles de almas y héroes
anónimos de este hermoso trabajo.
Uno de los sueños que me falta cumplir es...
Reincorporar la cultura del vino a las mesas familiares como
parte esencial de la alimentación. Reencontrar esos caminos perdidos. En lo
personal dedicarme a la escritura de cuentos, pasar más tiempo viendo crecer
los árboles y mis retoños... Involucrarme más en la naturaleza y el silencio.
Algo que siempre trato de enseñarle a mi hijo es...
Que no tengan miedo ante las cosas. Lo peor que puede pasar
es tener que recomenzar y eso da miles de oportunidades para vivir cosas nuevas
y aprender
El mayor legado que quiero dejarle a la vitivinicultura
argentina es...
Mi pequeño aporte es dejar un mínimo interés y respeto a
diversidad, mis humildes aportes a la caracterización de zonas pero básicamente
y resumiendo voy a dejar vino, que espero lo disfruten en los próximos 50 o 60
años; vinos que están hechos con pasión, respeto, amor y, en muchos casos,
coraje.
Fuente: www.iprofesional.com/
Alejandro, muy buenas tus palabras. Si bien no te conozco, creo que reflejan muy bien lo que sé que sos.
ResponderEliminar¿Para cuándo los vinos de inspiración literaria? ;)
Saludos,
Ariel
Grande capo.
ResponderEliminarInteresantes conceptos los que has vertido en este post.
ResponderEliminarPor favor avisá por este sitio cuando puedas llegar a ese vino inspirado por un libro y, en mi caso, sin madera o con muy poca.
Salute
Buenas palabras amigo. La humildad te hace fuerte por toda la vida.
ResponderEliminarAbrazos.
Felipe.
Me quedo con tu 1er respuesta (Un hombre de Mendoza que intenta todos los días de su vida ser buena persona y producir placer en la mayor cantidad de gente con el trabajo que me toca hacer). Muy lindas palabras hechas realidad.
ResponderEliminarAbrazo!